La crisis de la Justicia

La abogacía y su ejercicio están sufriendo una gravísima crisis
desde hace muchísimos años, la cual parece agudizarse cada ves mas, son
insuficientes los tribunales, sus equipos, su número de empleados, los salarios
que devengan, los equipos o material con el que cuentan y la falta de logística
para administrar la justicia ya no se justifica la existencia de Tribunales de
municipio con una cuantía hasta de cinco millones de bolívares, todos deben
transformarse en tribunales de primera instancia, y los de primera instancia en
superiores ello mejorará la celeridad procesal, sin incrementar los gastos. El
monopolio de la Fiscalía de la República para la acción penal de delitos
comunes a degenerado una gran inactividad ya que hay un déficit de mas de cinco
mil fiscales del ministerio público, como también un déficit de cuatrocientos
tribunales penales y de ochocientos tribunales civiles y de por lo menos
trescientos tribunales con competencia en materia administrativa. A ello hay
que agregar la poca autonomía del poder judicial en general, entre otras
razones porque la mayoría no tienen su cargo definitivo, son jueces provisorios
por lo tanto son lentos y timoratos porque están sujetos a una fácil remoción
por razones de tipo político  o
impulsadas por cualquiera de las partes, la justicia cada ves es mas lenta, el
delito y las infracciones cometidas a la ley son más rápidos que la justicia y
la prevención. Si a ello agregamos que los cuerpos policiales de investigación
se encuentran dentro de una crisis económica y de falta de capacitación. La
delincuencia está mejor equipada que hasta la misma

policía los deprimidos sueldos que reciben todos los
funcionarios de la justicia, los hace presa fácil del soborno, tanto que les
desanima su necesaria eficiencia y a ello debemos agregar el recargo de trabajo
que todos sin excepción tienen debido al incremento de la inestabilidad social,
es urgente destinar mucho mas presupuesto a la seguridad nacional, a la
justicia. A la protección de la propiedad privada, el respeto a la persona
humana a la posesión legítima de sus bienes y al domicilio, para ello a nuestro
entender, deberá crearse urgentemente un órgano policial y militar para la
protección de la propiedad privada y los bienes nacionales, la flora y la
fauna.

Deberán crearse además medios mas
idóneos para proteger a la propiedad privada y otros derechos de el hombre como
ciudadano dentro de los registros y notarías, donde existen con mucha
frecuencia sus plantaciones, haciendo uso de documentos falsos destinados a
disponer de bienes ajenos a través de falsos arrendamientos, y falsas ventas.
Existe mucha inseguridad jurídica debida a la acción de delincuentes que han
descubierto ciertos vacíos en la legislación y en las normas de seguridad. Por
ello muestro equipo de abogados y técnicos inmobiliarios en grafotécnia y
dactiloscopia están prestando un asesoramiento gratuito tanto al tribunal
supremos de Justicia como a la cámara inmobiliaria y a otros órganos vinculados
con proyectos legislativos para impulsar soluciones urgentes en materia
preventiva y de administración de justicia.