Por: Fernando Fernandez
No puede haber ciencia, tecnología e innovación sustentables sin inversión
Reformarán la LOCTI en segunda discusión. La reforma destruirá el sistema que mejor ha funcionado en nuestra historia de estímulo a la creatividad empresarial, universitaria y científica. Ni qué decir del talento humano, el más favorecido.
Una de las cosas peores de la reforma consiste en eliminar las inversiones de las grandes empresas y concentrar en el Estado la administración del capital. Con ello se echará por tierra el mejor de los cometidos de la LOCTI: que la empresa gaste en su gente, en nueva tecnología, en innovar los inventos, en transferir tecnología, en el desarrollo de la empresa y del propio país, de paso. Así se hizo en Japón y Corea y vean los resultados. Así está haciendo China y qué bien le va.
Que las empresas inventen, innoven, transfieran tecnología e inviertan en el talento humano es lo que ha hecho grandes a las corporaciones más creativas y famosas del mundo contemporáneo: la revolución tecnológica, de la información y de las telecomunicaciones han sido posibles gracias al ingenio humano y la inversión, es decir el gasto en maximizar los procesos productivos, pensando en la gente.
La LOCTI ha sido la única ley reciente que ha generado una interacción positiva entre los empresarios, universidades, Gobierno y empleados. Se trata de una ley que combina premios y castigos con equilibrio y sensatez. Es una ley que se basa en una mezcla virtuosa que estimula el talento, la creación, la invención y la innovación. No puede haber ciencia, tecnología e innovación sustentables sin inversión.
Lo que prevé la Reforma a la LOCTI es que el Estado se apropie de las inversiones en un fondo único, con lo cual se romperá la unidad del Tesoro, como diría el Dr. José Andrés Octavio, un sabio inolvidable.
fernando.fernandez@bakermckenzie.com